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5 maneras para mantenerse activo con enfermedades cardíacas

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Hace cinco años, tuve un ataque cardíaco a los 38 años. Dañó el 20 por ciento de mi corazón y cambió mi vida.

Mi médico me recetó varios medicamentos para controlar mi enfermedad cardíaca y me recomendó que perdiera de 10 a 20 libras para reducir el riesgo de complicaciones de la enfermedad cardíaca. Bajar de peso significaría que mi corazón tendría que trabajar menos para bombear sangre por todo mi cuerpo.

Mi cardiólogo me sugirió que hiciera dieta y ejercicio para bajar de peso. Agregó que el ejercicio es importante para fortalecer el corazón. Reduce la presión arterial y el azúcar en sangre, reduce el estrés e incluso puede ayudarlo a dormir mejor. Todos estos beneficios favorecen la salud cardíaca.

La Asociación Estadounidense del Corazón (American Heart Association) recomienda apuntar a 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada por semana. La actividad moderada es cualquier actividad en la que respira más fuerte, pero aún puede mantener una conversación, como caminar enérgicamente.

Mi médico no me dio un programa específico ni un marco temporal, creo que porque acababa de tener un ataque cardíaco masivo y no quería estresarme. Quería que yo apuntara a una cantidad razonable de ejercicio a un ritmo constante.

La lucha por perder peso y mantenerse activo

Comencé con 3 meses de rehabilitación cardíaca. Lentamente, esto me hizo confiar en que estaba lo suficientemente bien como para hacer ejercicio por mi cuenta.

Cuando terminé con la rehabilitación cardíaca, comencé a caminar y trotar en la cinta caminadora. Pronto me enteré de que no tenía la fuerza o la resistencia para hacer ejercicio como solía hacerlo debido al daño en mi corazón. La lucha rápidamente se volvió real.

Podía correr fácilmente 4,8 km aproximadamente un año y medio antes de mi ataque cardíaco. Luego, apenas podía correr 1,6 km. Fue definitivamente frustrante.

Me di cuenta de que tenía que ser creativa para mantenerme activa.

Estos son mis cinco consejos para hacer ejercicio con enfermedades cardíacas.

Estacione lejos de hacia dónde se dirige

¿La forma más simple de hacer más ejercicio? Agregue una caminata en su rutina diaria.

Estacionaba lo más lejos posible de nuestra puerta de seguridad en mi antigua oficina. Mi caminata diaria era de 1,7 km de ida. Temía la rutina. Pero sabía que le estaba haciendo bien a mi cuerpo.

Uso esta táctica cuando voy al supermercado o al centro comercial. Nunca doy vueltas en el estacionamiento para encontrar estacionamiento de primera calidad. Tomo un lugar disponible en un lugar lejano porque sé que caminaré pasos adicionales.

Claro, es como una caminata en un día caluroso, pero vale la pena. Este podría ser el entrenamiento más grande que esté haciendo. Tiene que aprovecharlo.

Vaya de compras

Mi ataque cardíaco ocurrió en junio. Hacía demasiado calor para hacer ejercicio al aire libre. Comencé a caminar regularmente por las tiendas departamentales locales durante 30 minutos a mi propio ritmo.

Todavía voy de “compras” cuando quiero dar un paseo sin prisa en otro lugar que no sea una cinta de correr del gimnasio. Me siento cómoda y segura rodeado de tantas personas.

No tiene que comprar nada, pero sí puede buscar. ¡Además, es bueno observar a las personas!

Tome las escaleras en lugar del ascensor

Lo admito. ¡A veces esto es difícil! Pero vale la pena.

El ascensor lo lleva del punto A al punto B sin esfuerzo. ¡Suba por las escaleras y siéntase orgulloso de sus logros!

No tiene que correr. Caminar está bien, siempre y cuando lo haga. Sienta que está ejercitando, pero no se esfuerce demasiado.

Las escaleras todavía me enrollan, así que solo subo un piso a la vez. Tomo el ascensor por ahora si necesito subir dos o más pisos.

Dé un paseo por la oficina

Hay estacionamiento disponible en la puerta principal de mi nueva oficina. Tuve que encontrar nuevas formas de sumar pasos. Trabajo en una oficina grande, así que ahora doy vueltas frecuentes alrededor del edificio.

Sé lo tentador que puede ser seguir trabajando detrás de su escritorio todo el día. Pero el aire fresco es vigorizante después de estar frente a la pantalla de una computadora.

Levántese y estire las piernas durante 5 a 10 minutos cada dos horas. Puede ser útil mantener un par de tenis debajo de su escritorio. Dé una o dos vueltas dentro o fuera del edificio de su oficina. Estará listo para volver a la rutina cuando haya terminado.

Haga las tareas domésticas

No sé usted, pero lavar la ropa es un ejercicio para mí. Un par de cargas me agotan.

¿Verificar y organizar el correo? Eso cuenta como una tarea: Tienes que caminar hasta el buzón, ¿verdad?

Divida sus tareas domésticas en pequeñas tareas diarias. De esa manera, puede ser productivo y activo todos los días.

Hay muchas más maneras de mantenerse activo todos los días. Todas las personas tienen necesidades diferentes en función de su diagnóstico de enfermedad cardíaca y sus niveles de energía y actividad. Hable con su médico y creen juntos un plan que sea realista y saludable para usted.

Ha sido una verdadera lucha, pero he mantenido mi peso y me estoy volviendo más fuerte y aumentando mi resistencia. Espero aumentar mi nivel de actividad a medida que pasa el tiempo.

La información brindada es solo para fines educativos y no sustituye el asesoramiento médico profesional. Para obtener más información sobre cómo manejar la enfermedad cardíaca, comuníquese con su médico o equipo de cuidados de salud.

NPS-US-NP-00603 JULIO 2022


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